Las infecciones de la piel rara vez son producidas por contagio o por la ación directa de bacterias . En su gran mayoría , las piodermias ( pio = pus , dermis = piel ) son una consecuencia de la contaminación de una piel que está sufriendo un proceso inflamatorio o degenerativo , que la predispone a ser colonizada por microorganismos . Estos microorganismos pueden llegar a la piel de diferente manera . En un gran porcentaje de casos , las bacterias que se encuentran en las lesiones , son bacterias de poder patógeno ( propiedad de poder causar enfermedad por sí mismas ) escaso . Muchos microorganismos presentes en las lesiones son habitantes normales de la piel , pero dadas las circunstancias especiales de desintegración de la piel como barrera defensiva , y de alteración de sus estructuras y funcionamiento normales sumados a cambios en el estado defensivo del animal , dichos microorganismos pueden ocasionar enfermedad .

La citología es la herramienta más económica y efectiva para diagnosticar una piodermia , asociada al cultivo de la muestra .

El microorganismo mas frecuentemente encontrado en las infecciones de la piel en perros y gatos es el estafilococo común , pero en algunas ocasiones pueden encontrarse bacterias como Escherichia coli , Pseudomonas , Proteus . Siempre que una infección cutánea se torne crónica o repetida , o difícil de erradicar , es importante encarar una serie de estudios complementarios con el fin de determinar qué es lo que perpetua la infección , y si el microorganismo involucrado ha mutado haciéndose resistente al tratamiento recetado .

Esto se hace mediante un cultivo en profundidad de las lesiones , lo cual requiere del cultivo directo del material de biopsia , no de secreciones superficiales .

Ciertas infecciones pueden parecer graves en su aspecto , pero pueden ser medianamente sencillas de controlar , como en el caso de los llamados eczemas húmedos o parches calientes , o las infecciones o foliculitis superficiales . Cuando éstas infecciones sencillas se repiten con cierta frecuencia , es necesario investigar la causa básica que puede ser una alergia , hipotiroidismo , u otras enfermedades .

El acné es una forma profunda de piodermia , en general quística o inflamatoria , que comprende la infección del folículo piloso y la acción de irritación que produce el pelo enquistado o atrapado dentro de un microabsceso . El propietario debe ocuparse de lavar diariamente la zona y aplicar productos de acción antiacneica específicos en la zona afectada .

La piodermia profunda , comúnmente observada en perros de raza ovejero alemán o sus cruzas , tiene un origen inmunológico y otras causas aun en estudio . Requiere de una terapia agresiva a largo plazo , en la cual están contraindicados los corticoesteroides . Resulta de gran ayuda rasurar por completo el pelaje del animal para poder bañarlo con frecuencia con productos antibacterianos y cicatrizantes que ayudan a la acción de los antibióticos sistémicos , favoreciendo la recuperación de la piel y desinflamándola .

La foliculitis bacteriana es sumamente común , sobre todo en perros de pelo corto . Su aspecto clínico es el de un manto apolillado , y se confunde con suma frecuencia con una tiña o infección por dermatofitos ( hongos ) . Se recomienda siempre la investigación de una alergia subyacente o de hipotiroidismo que cause alteración en la barrera defensiva de la piel .

En los gatos existe también la formación de abscesos por mordedura o heridas producidas por otros gatos . Estas heridas deben ser tratadas agresivamente con antibióticos , realizando la apertura en forma quirúrgica para drenar el absceso y eliminar el foco infeccioso con éxito .Estos animales deben ser evaluados por la posibilidad de que hubiesen contraído inmunodeficiencia felina o leucemia felina .

El tratamiento de las infecciones bacterianas de la piel debe ser planificado con cuidado , eligiendo el antibiótico adecuado ; la dosis y duración de tratamiento deben corresponder al diagnóstico del proceso presente . La selección de combinaciones terapéuticas locales ( tratamiento tópico o externo ) es fundamental , ya que produce un ahorro de tratamiento sistémico y un alivio temprano de la inflamación y supuración , reduciendo también la molestia , el prurito y el dolor .

Suspender o prolongar un tratamiento sin la recomendación del especialista , o modificar la dosis a criterio propio , puede resultar en una piodermia crónica grave , ya que puede generarse resistencia bacteriana por mal empleo de antibióticos .

Nuestro consejo es que , siempre que su mascota sufra de una infección de la piel que se vuelve crónica , difícil de tratar o manejar , o que se repite con cierta frecuencia en el tiempo a pesar de los tratamientos , debería consultar a un especialista en dermatología veterinaria . De éste modo Ud. Invertirá mejor el dinero que gasta en su mascota, y su mascota sufrirá menos al haber menos demora en obtener un diagnóstico y un tratamiento .